> Al pie del Guadalquivir: La alegoría que Sevilla pudo ver

sábado, 21 de marzo de 2020

La alegoría que Sevilla pudo ver


Sagrado Corazón de Jesús
Hermandad de las Siete Palabras
En 1888, una de las ramas de la Hermandad de las Siete Palabras, reconocida como “La Antigua, Fervorosa y Real Archicofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de las Siete Palabras, Sagrado Corazón y Clavos de Jesús, María Santísima de los Remedios, San Juan Evangelista y Nuestra Señora de la Cabeza”, decidió llevar a cabo uno de los proyectos más interesantes, aunque por desgracia inconcluso, del pasado siglo en cuanto a nuevas escenas que poner en la calle.

Las reglas de casi un siglo antes, 1798, estipulaban la realización de un paso alegórico del Sagrado Corazón de Jesús, encontrándose incluso una descripción, más o menos detallada, de lo que iba a ser una vez realizado.


De la web de la corporación, la descripción de la idea del paso:

Aparecía sobre unos grupos de nubes el Divino Redentor con los ojos elevados al cielo y la mano derecha señalando a su corazón en actitud de pronunciar las palabras del profeta: «Paratum cor meum» (mi corazón está preparado para el sacrificio). A la derecha del Salvador estaba arrodillado el Ángel de la Misericordia con la Santa Cruz, dando gracias al Señor, porque sin mérito alguno por parte del hombre, y sólo por la bondad de su amante y generoso corazón, iba a sufrir por Él muerte de Cruz, conquistándole con su sangre la vida eterna. Al lado izquierdo se hallaba de pie el Ángel de la Justicia con el peso y la espada vuelta hacia abajo, demostrando que aplacaba la indignación Divina con el voluntario sacrificio de Jesús, apartaba el Eterno Padre la espada con su justicia, con la cual amenazaba castigar la prevaricación de nuestro primer Padre. Delante, y en posición más baja se encontraba un grupo de cuatro figuras que eran Abraham, Moisés, Isaías y David, los cuales representaban a los Santos Padres y Justos de la antigua Ley, que detenidos en el Limbo suspiraban ardientemente por la venida del Mesías Redentor que había de sacarles de aquel lugar y darles la posesión de la Gloria Eterna, de la cual estaban privados por la transgresión del Paraíso".

Misterio de las Siete Palabras, Sevilla
Fuente: web corporativa

En definitiva, la imagen del Sagrado Corazón de Jesús, acompañado de dos ángeles y de Abraham, Moisés, Isaías y David.
El Sagrado Corazón de Jesús fue realizado en 1891 por Emilio Pizarro de la Cruz, que, él mismo, acabó diez años más tarde, 1901, el resto de esculturas. Durante este período de tiempo, también se lleva a cabo la talla del paso.
Por razones que no se conocen muy bien, aunque todas las reflexiones y estudios lo acercan a un problema económico, cuando se acercaba el año de la primera salida procesional, 1914, decidió no realizarse.

El paso se utilizó para la salida del Misterio de las Siete Palabras, aunque solo fue hasta 1923, cuando este volvió a ponerse sobre las andas que tenía anteriormente. Estas nuevas, fueron a parar, previa venta, a la Hermandad del Buen Fin.


La imagen del Sagrado Corazón permaneció al culto hasta el año 1951. En este momento se bendice una nueva, de menor tamaño, de las hechas en serie en Olot (Gerona), actualmente ubicada en la sala capitular.
La talla de Pizarro se conserva en las dependencias de la corporación.



Nuestra Señora de la Cabeza


Abraham, Moisés, Isaías y David, como ya vimos en un artículo anterior, fueron vendidos a la Hermandad de la Cena para su conversión en apóstoles por el imaginero Bidón.
Más curioso resulta el paradero de los dos ángeles, del que uno de los dos no se sabe nada, y el otro fue transformado por Escamilla en 1956, para convertirse en Nuestra Señora de la Cabeza por un proyecto de palio que llevó a delante la Hermandad.